Hace tiempo te dejé ir , probablemente porque te veía como algo imposible, y porque nuestras edades diferían en un grado que quizás la madurez y experiencia hacían que nuestras opiniones sean casi siempre contrarias. Te conocí y me encantaste, pero sabía que no podía encajar en tu vida, tu locura de adolescente, tus vivencias incomprendidas, tu carácter extrovertido, tú; Tú eras mi yo al revés, la niña loca que confiaba en mí sin que yo se lo pida, que me leía y me acompañaba en mis lecturas, la niña amable y de corazón noble que se negaba a aceptar el amor. Tú niña de piel canela eras parte de…