Y entonces ella cogió sus maletas y se fue dejando un sobre, cuando llegué a casa, no había nada más que sus recuerdos, a pesar que ya me había deshecho de varios, aún nuestras fotografías inundaban mi álbum y mi mente, ¡Maldita sea!, caí de rodillas en el duro piso de mi habitación y me tragué mi tristeza sobre mi cama. Soñé muchas veces con ella aquella noche, al despertar sentía que la amaba, con odio, con amargura, con tristeza y locura, era una bruja loca, me hacía sentir todas las sensaciones en un solo instante a pesar que no estaba aquí, su rastro era persuasible. ¿por qué sientes tristeza?,…